Alma artesana
Este proyecto ha sido uno de nuestros favoritos hasta la fecha; poder realizar unos vídeos con tanta libertad en el rodaje y en unas localizaciones tan variadas, fue un verdadero gustazo. Mostrar las profesiones de los artesanos, un sueño. El alma de este proyecto fueron, precisamente, los artesanos: diferentes personas especializadas en distintos oficios, pero todos ellos trabajando con sus propias manos para conseguir un producto único y artesanal.
El proyecto de Artesanos para Vermut Lustau consistió en una serie de tres vídeos, rodados en diferentes momentos de un mismo año y en los talleres de cada uno de nuestros tres artesanos. En estos vídeos mostrábamos el día a día en el trabajo de los artesanos, todo ello guiado hacia el producto, el vermut, de modo que cada uno de ellos lo relacionaba con su vida o su trabajo y elegía su variedad de vermut favorita.
Todo esto llevó consigo una preproducción muy cuidada en la que se tuvo que hablar con cada artesano, visitar las localizaciones, elegir la iluminación y conocer en profundidad sus oficios para poder elegir qué mostrar y cómo hacerlo para ser fieles a su trabajo. Muchas veces se infravalora el poder de una buena preproducción en el mundo audiovisual, pero es verdaderamente imprescindible para conseguir una producción de calidad y un vídeo gastronómico inolvidable.
Estos vídeos son una mezcla de vídeo promocional y entrevistas, que dicho así suena al género más aburrido sobre la faz de la tierra, pero nuestro trabajo era, precisamente, que al espectador no se le pasase por la cabeza ni por un segundo que lo que estaba viendo fuese aburrido. Aportar belleza y delicadeza en los planos, elegir los movimientos justos y los colores más armónicos es fundamental para que este tipo de vídeos resulten atractivos. Escribir un buen guion, por otro lado, será lo que consiga enganchar al espectador. Finalmente, la edición y la postproducción, rematarán la jugada.
Dentro de la fase de producción y rodaje, la labor del realizador es muy importante. Hay que tener en cuenta que no estamos tratando con actores ni con periodistas, acostumbrados a hablar cómodamente delante de las cámaras. En este caso estábamos trabajando con gente normal, artesanos especializados en su oficio, pero no en comunicar con una cámara mirándolos de frente y juzgándolos. Por esa razón es muy importante que el realizador haga sentir cómodo al entrevistado, que le aporte facilidades, que le oriente con sus respuestas o que le deje elegir el espacio en el que se sienta más cómodo y relajado.
Escoger la música será importantísimo y de ella dependerá lo que el espectador sienta al ver nuestro vídeo. También es fundamental que la música no le robe el protagonismo a la imagen; la imagen es nuestra estrella y la música es su acompañamiento que la convertirá en algo perfecto.
Finalmente, cuidar de la postproducción y del montaje de los vídeos tiene que ser también una prioridad. Hay que elegir un ritmo que acompañe a la imagen y que transmita el sentimiento que deseemos provocar, etalonar y colorizar la imagen para que el vídeo se ajuste tantos a los valores de la marca como a los del artesano y seleccionar las mejores partes de la entrevista que resulten más relevantes para contar la historia detrás del oficio y que lo relacione a la perfección con la marca.
En este tipo de proyectos, nos encargamos de todas las fases de la producción audiovisual: desde la guionización y la preproducción con visitas a las localizaciones y los protagonistas, gestión de permisos, compras o alquiler de material, hasta la edición de los vídeos en su totalidad, pasando por el rodaje, por supuesto. Ayudar a nuestros clientes a conseguir plasmar su idea en un vídeo es nuestra pasión y nuestra vocación y un verdadero placer poder hacerlo con proyectos tan bonitos como este.